LA HABANA. Cuba devolvió hoy a Estados Unidos un misil que fue recibido “por equivocación” en la isla en 2014, el cual regresó a territorio norteamericano custodiado por un equipo de expertos de ese país, informó en un comunicado la Cancillería cubana
“Cuba actuó con seriedad y transparencia, y cooperó para encontrar una solución satisfactoria a este hecho”, indica el texto, que precisa que el misil, un “cohete con cabeza de autoconducción láser AGM 114 Hellfire”, llegó al país caribeño en junio de 2014 en un vuelo procedente de París “por equivocación o mala manipulación en el país de procedencia”.
La declaración señala que una vez que el Gobierno estadounidense comunicó oficialmente a La Habana su interés de recuperar el misil, “Cuba transmitió la decisión de entregarlo y se iniciaron las gestiones entre ambas partes para proceder a su devolución”, que culminaron con el regreso del misil este sábado a EE.UU.
“Para las autoridades cubanas resultó preocupante el arribo al país de un medio militar de fabricación estadounidense, que no había sido declarado como tal en el manifiesto de carga de la aeronave que lo transportó”, destaca la nota de la cancillería cubana.
La isla insiste en que el misil, de la firma Lockheed Martin, “fue debidamente conservado y custodiado”, hasta la llegada de “un equipo de expertos del Gobierno estadounidense y de la mencionada compañía que viajó a Cuba para revisar el estado de la carga”.
El pasado 7 de enero se conoció por la prensa estadounidense que un misil norteamericano sin carga explosiva, enviado inicialmente a España en 2014 y utilizado en unos ejercicios militares de la OTAN, terminó involuntariamente en Cuba, en lugar de regresar a su país de origen.
En este caso particular, el misil salió del aeropuerto de Orlando (Florida, EE.UU.) con destino a la base naval de Rota (Cádiz, España), y fue utilizado en unos ejercicios de la OTAN, según el diario estadounidense The Wall Street Journal.
De acuerdo al diario, EE.UU. llevaba más de un año pidiendo a La Habana que devolviera la pieza, por temor a que la avanzada tecnología de la que está dotado el misil pudiera ser compartida con naciones como China, Corea del Norte o Rusia.
Los misiles “Hellfire” son disparados desde aviones de combate o helicópteros y aunque fueron diseñados como armas antitanque, se han modernizado y han sido utilizados desde drones para atacar objetivos de grupos terroristas en Yemen o Pakistán.