SAN CRISTOBAL.- Fueron enterrados en una fosa común y debajo de una mata de mango en el cementerio de San Cristóbal, los tres niños que murieron asfixiados dentro del baúl de un carro estacionado próximo a un taller de mecánica, ubicado en el sector Villa Fundación, San Cristóbal.
Las víctimas –dos hermanos de 4 y 2 años de edad y un primo de 3- Luis Amauris y Yohansen Galán, y Riner Guzmán, respectivamente, quienes habían desaparecidos en horas de la mañana del sábado, fueron encontrados muertos en horas de la noche, en el baúl del carro Toyota Cressida, rojo, bajo el cuidado de Milciades Roa, quien alegadamente dijo que tiene el vehículo en venta.
Hoy, en el entierro, el llanto y la tristeza eran elementos comunes entre familiares, vecinos y amigos.
Se recuerda que los cuerpos fueron levantados por la médico legista, Bélgica Nivar, quien dispuso su envío al Instituto Nacional de Patología Forense (Inacif), para que les sean practicadas necropsias y precisar las causas reales de las muertes.
Mientras que varios equipos de oficiales de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM) profundizan las pesquisas para establecer las circunstancias en que ocurrieron los hechos.