Residentes en la zona del lago Enriquillo afectada por la crecida de sus aguas sienten incertidumbre por miedo a que las lluvias provocadas por la tormenta Chantal empeoren la situación que padecen, informó ayer Benjamín Batista, experto en desarrollo local y responsable del trabajo de campo del programa Frontera, del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
Dijo que sobre todo la población de Boca Cachón puede ser afectada si continúan los intensos aguaceros, debido a que esa comunidad se encuentra ubicada por debajo de la cota cero del lago.
Advirtió que es una situación de riesgo el incremento y la permanencia de las lluvias, ya que Boca Cachón está ubicada cerca del alcance de la expansión del crecimiento del lago Enriquillo. Allí residen unas 538 familias. Por igual, advirtió que parte de Tierra Nueva, que colinda con el lago Azuey, está creciendo, por lo que podría correr igual suerte “Dicho sea de paso las pequeñas poblaciones de La 38, La 39 y La 40 han sido ocupadas por el lago Azuey.
Los pequeños poblados de La 38 y La 39 son mixtos, haitianos y dominicanos. En La 40 son en su mayoría nacionales haitianos. De seguir las lluvias se afectarían esos poblados que corresponden a Tierra Nueva, colindante con el lago Azuey”, dijo Batista.